La primera práctica tuvo una serie de despistes que dejó restos de leca (gravilla de seguridad) sobre la pista que obligó a sacar la bandera roja. La sesión se interrumpió cuando Paul Aron salía nuevamente a girar. ¡Menos mal!
Monza: sin Franco, pero con Alpine asustando a los argentinos
La primera práctica libre dejó un susto importante a los argentinos, en el comienzo mismo. Alpine anunció que se turno sería para que pruebe el auto número 43 el estonio Paul Aron. Por lo tanto, Franco no iba a participar. Entonces, los argentinos miraron de reojo la primera tanda de Monza. No por lo que pudiera suceder al tope de clasificación. Nada menos que 45 millones de argentinos se convertieron en "ángeles guardianes" del Alpine de Franco.
Aron salió a probar y, en su primer intento, dio un susto de novela. Calculó mal una frenada e hizo un trompo. Se fue de pista y con él, nuestros corazones. Afortunadamente, Monza tiene vías de escape y una buena cama de leca. Conclusión, la gravilla contuvo al Alpine descontrolado de Aron (de Franco, en realidad). El auto salió indemne del trompo.
Menos mal, porque un choque podría haber afectado - y mucho - a Colapinto para la FP2 de este mediodía (hora argentina). Si los Alpine son más que lentos en condiciones normales, es fácil imaginar la condena para el pilarense de tener que manejar con un auto reconstruido. Pero eso no pasó, por suerte. A otra cosa.
Poco efecto aerodinámico, muchos despistes, bandera roja
Monza, la catedral italiana del automovilismo, es el circuito más rápido del año. Los autos llegan a 345 kilómetros por hora en sus largas rectas. Por eso, se utiliza poca carga aerodinámica. Y eso les jugó una mala pasada a varios pilotos en la primera práctica. No solo a nuestro "amigo" Aron. Varios se fueron de pista, porque las gomas, con el máximo de presión, no tienen tanto agarre, y por lo tanto, el "camino ideal" se llenó de leca (pequeñas piedras de grava). Con la pista sucia, las autoridades del circuito tuvieron que sacar la bandera roja.
Buena noticia para los argentinos: la bandera que interrumpió la práctica se mostró justo cuando Aron intentaba probar nuevamente. Luego, el entrenamiento se pudo completar y, ahí sí, los italianos tuvieron lo que van a buscar año tras año desde 1950, el primer campeonato mundial de Fórmula 1: Ferrari logró el 1-2 y encima con Lewis Hamilton delante de Leclerc. La pésima carrera en Zandvoort hizo que los "tifosi" perdieran la paciencia esperando al séptuple campeón mundial.
Y por casa (Alpine), ¿cómo andamos?
En Monza, los argentinos sumamos puntos. Mucho más Franco Colapinto. Ya le cerró la boca a Briatore en los Países Bajos. Si no sumó puntos fue por la mala estrategia del equipo. Franco corrió más rápido que su auto y llegó 11°. Muchísimo mejor que su compañero, Pierre Gasly.
Y aún sin correr, a Briatore le llegó otro mensaje de millones de argentinos. Eso que tanto molesta al equipo Alpine por las redes. Los autos azules y rosa de la casa francesa fueron como siempre, los más lentos. Y sin Franco Colapinto. Gasly terminó 18° y Aron ( con el auto del argentino), último a más de dos segundos del primero, Hamilton. Si corría para el otro lado lo iba a ver antes al inglés con la Ferrari.
no es franco
El Alpine no corre ni con Fangio. Paul Aron probó con el 43 de Franco Colapinto y salió...último. (foto: Captura de TV)
Mejor que Briatore busque otros argumentos. No es Franco el problema. Es más, hasta sus indicaciones tácticas, muchas veces, son mejores que las de su ingeniero. En la segunda tanda de pruebas libres lo veremos al argentino en su butaca en Monza. El lugar en donde comenzamos a soñar hace un año.