El monto previo, vigente hasta diciembre de 2024, era de $480, por lo que la Secretaría de Transporte estableció un incremento del 150% en el saldo de emergencia.
Esta actualización busca mejorar la movilidad de millones de usuarios, garantizando que puedan acceder al transporte incluso en situaciones en las que no puedan recargar la tarjeta de inmediato.
Este beneficio es automático y se activa cuando el saldo de la tarjeta llega a cero. Al utilizarlo, el monto negativo se descontará de la próxima recarga que el usuario realice.
El nuevo saldo negativo de la Tarjeta SUBE no es el mismo para todos los medios de transporte. Según el tipo de servicio utilizado, el monto disponible varía:
- $1.200 para subtes de la Ciudad de Buenos Aires y el transporte fluvial en el Delta.
- $650 para líneas de trenes del AMBA, incluyendo Mitre, Sarmiento, Roca, San Martín, Belgrano Norte y Sur, además del Tren del Valle en Neuquén.
- $480 para la línea Urquiza, que mantiene el saldo anterior hasta que finalicen las actualizaciones tecnológicas en sus molinetes.
Esta diferenciación responde a distintos factores, como las tarifas vigentes en cada medio de transporte y las necesidades de adaptación de los sistemas de validación.
La carga de la tarjeta puede realizarse de manera presencial en los puntos habilitados o electrónicamente, a través de la app SUBE, cajeros automáticos, homebanking o billeteras virtuales.
En caso de elegir una carga electrónica, es necesario acreditar el saldo en la tarjeta utilizando la app SUBE, las Terminales Automáticas o la opción Carga a Bordo en las validadoras de los colectivos.