La mayoría de los recursos, que sigue a un plan de 2,2 billones de dólares aprobado en marzo, irán a las medianas y pequeñas empresas.
Tras ser aprobada por el Senado a inicios de la semana, el proyecto fue adoptado por la Cámara de Representantes este jueves, cuando otros 4,4 millones de trabajadores estadounidenses solicitaron nuevos subsidios de desempleo.
De esa manera, las solicitudes de ayuda por desempleo llegaron a 26,4 millones desde mediados de marzo.
La tasa de desempleo se disparó en un país paralizado para contener la propagación del virus, que ya deja más de 50.000 estadounidenses muertos.
El nuevo paquete incluye 320.000 millones para que las empresas mantengan sus puertas abiertas y paguen a sus empleados, luego de que se agotó el primer tramo de 349.000 millones de dólares.
El nuevo paquete también otorga 75.000 millones en ayudas para hospitales, 25.000 millones para tests de diagnóstico de coronavirus, y 60.000 millones para préstamos a agricultores y ganaderos.
Fuente: agencia AFP