La búsqueda se extendió hasta que los investigadores establecieron que Luna se ocultaba en una vivienda de calle 112 entre 17 y 15, en Miramar. Rodeado por la policía, se entregó sin resistencia. Presentaba heridas compatibles con perdigones, lo que coincidía con la hipótesis de que Costa alcanzó a defenderse disparando desde el interior de la casa.
El detenido fue trasladado primero al Hospital Municipal de Miramar y luego al Hospital Rossi de La Plata, donde quedó internado con custodia y se le extrajo sangre para análisis. En el operativo se secuestraron dos celulares que serán sometidos a peritajes.
Las pruebas que vinculan a Luna con ambos hechos —el mismo calibre de las vainas y la renguera observada en los videos— reforzaron la acusación en su contra. Ahora permanece detenido, a la espera de ser indagado, mientras la SubDDI de Miramar continúa la búsqueda de los otros implicados en el crimen de Costa.