25 DE MAYO

García Cuerva, el cura villero que llegó a Arzobispo e incomodó a Milei: "No podemos hacernos los tontos"

Quién es Jorge García Cuerva, el arzobispo porteño que dio un duro mensaje durante el Tedeum del 25 de Mayo. Su pasado en La Cava y su labor parroquial en cárceles y villas contra la droga.

Facundo Pastor
por Facundo Pastor |
García Cuerva, el cura villero que llegó a Arzobispo e incomodó a Milei: No podemos hacernos los tontos

El referente del purpurado local señaló que la mirada de Jesús "alerta sobre la insensibilidad con los más desprotegidos, reclama mayor compromiso y cercanía con los que sufren".

También habló del odio como el motor de la desintegración y la fragmentación social. Y continuó: "El pasado nos enseña que todo lo que amamos se puede destruir en base a la instrumentalización, rédito instantáneo para los saqueadores de turno e incapacidad presente para pensarnos como Nación".

El fragmento más crítico de su discurso fue cuando dijo que la gente "está haciendo un esfuerzo muy grande" y remarcó que la dirigencia debe "acompañar con hecho y no sólo con palabras". El presidente estaba sentado en primera fila; a su lado, la vicepresidenta, Victoria Villaruel.

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García Cuerva apeló a la "conciencia" de cada uno: "En estos tiempos difíciles, ¿qué estoy haciendo por los más pobres y los que sufren? ¿Podremos mirarnos y responder esa pregunta, sin echar culpa como adolescentes, sino desde la responsabilidad de hacernos cargos, incluso si es necesario realizando una autocrítica madura que tanto necesita escuchar alguna vez nuestro pueblo?".

"Nuestra gente está haciendo un esfuerzo muy grande y nosotros no podemos hacernos los tontos. Hay que acompañar con hechos y no sólo con palabras ese enorme esfuerzo de nuestra gente. Por eso siguen doliendo algunas acciones de la dirigencia divorciadas de la ciudadanía de a pie, como los tan comentados auto aumentos de sueldos de algunas semanas atrás", agregó.

El primado también pidió "eliminar la doble vara" a la hora de juzgar a la política y remarcó: "No es lo mismo unirse que confabular; no es lo mismo fraternizar y forjar la cultura del acuerdo que ser cómplice del mal con el sólo ánimo de destruir al otro, de pensar estrategias para que al otro le vaya mal, creyendo que cuanto peor, mejor".

Quién es Jorge García Cuerva

García Cuerva conoce como nadie los márgenes del territorio de los más vulnerables. Allí dio sus primeros pasos. Allí todavía lo llaman “el padre Jorge”.

El 14 de marzo de 1989 entró al seminario de la Diócesis de San Isidro. Algunos años después fue ordenado sacerdote en la Catedral de San Isidro por el entonces obispo Jorge Casaretto. En 2006 pasó a ser párroco de la Iglesia Santa Clara de Asís en la localidad de El Talar, partido de Tigre, en los barrios populares San Pablo y Almirante Brown.

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Con el tiempo terminó siendo el párroco de la emblemática villa La Cava.

Fue miembro de la Comisión Nacional sobre la Drogodependencia de la Conferencia Episcopal Argentina (hasta el año 2013).

Tuvo un destacado recorrido en el ámbito de la Pastoral Carcelaria siendo capellán de unidades carcelarias en la provincia de Buenos Aires (desde el 2011); delegado diocesano de la Pastoral Penitenciaria (desde 1997); delegado regional de la Pastoral Carcelaria, y representante de América Latina y el Caribe ante la Comisión Internacional de la Pastoral Penitenciaria Católica (ICCPPC) en 2010 y 2017.

Luego fue nombrado obispo auxiliar de Lomas de Zamora el 20 de noviembre de 2017 y obispo de Río Gallegos desde el 3 de enero de 2019. Sus dos últimos cargos antes de convertirse en arzobispo porteño.