El Gobierno atravesó su peor semana. La oposición marcó la cancha y puso los primeros límites políticos en serio. La crisis de los alimentos y el futuro del ministerio de Capital Humano.
Javier MIlei con su ministra estrella Sandra Pettovello (Foto: Archivo)
La última vez que Javier Milei mencionó a Sandra Pettovello en público fue el miércoles, en un evento para recaudar fondos para programas sociales dedicados a la infancia. Habló ante un foro de miles de empresarios que lo aplaudían rabiosamente. En ese discurso cambió el tiempo verbal de sus elogios a Pettovello: cambió el “está haciendo” por un “hizo”.
"Estamos viendo una enorme tarea, que hizo la ministra Pettovello, quien ha sido tan torpedeada, en estos últimos días".
"Miren la cosa maravillosa que hizo la ministra Pettovello".
Ese mismo día, a la noche, Karina Milei -el Jefe- fue al Congreso. A la salida, la abordó un periodista y le preguntó por Pettovello. Extrañamente, decidió hablar -jamás hace declaraciones políticas- y dijo simplemente: “Una de las mejores ministras”. También apeló a tiempos verbales indefinidos.
Pettovello, la ministra de Capital Humano, tiene los días contados en el Gobierno; es cuestión de tiempo.
Los hermanos Milei la elogian permanentemente. No es un respaldo, sino un pedido de que se quede un tiempo más, de que ellos la van a bancar. Pero necesitan que pasen unos días para disipar la triple crisis política que atravesó el Gobierno esta semana con destino incierto.
Ese combo político impactó directamente en el corazón del programa de Gobierno: cayeron los bonos y acciones, subió el dólar y el riesgo país. Se espera además que eso tenga un correlato en la inflación de junio: según el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) que promedia los números de las consultoras más importantes del país, por primera vez la inflación de junio va a ser más alta que la del mes anterior.
Diputados aprobó una nueva ley de movilidad jubilatoria gracias a un acuerdo entre el peronismo, el radicalismo y otros bloques menores. Es decir, la casta toda junta.
El proyecto implica:
Según los que hicieron el proyecto, esto solo costaría el 0,4% del PBI. Pero teniendo en cuenta que el superávit del primer cuatrimestre fue 0,2%, destrozaría el equilibrio fiscal, principal política de Javier Milei para contener la inflación y hacer que la economía crezca. Es un golpe al corazón económico del Gobierno.
Fue un aviso del poder de fuego de la oposición. Los mercados lo leyeron.
En los próximos días se vienen otras movidas importantes:
Milei avisó que si sale la ley jubilatoria (esta o cualquier otra que implique más gasto) la va a vetar. Pero...
Conclusión: el Congreso mostró los dientes. Por primera vez LE APRUEBA una ley en contra a Milei. Si esto hace con un gobierno que tiene 50% de popularidad, ¿qué podría hacer si empieza a caer en la opinión pública?
Milei, en campaña, gritaba “Afuera” cuando se le preguntaba por los ministerios. Quiso bajarlos de 22 a 8. Las principales fusiones pasaban por reagrupar un montón de organismos en dos megaministerios: el de infraestructura y el de Capital Humano.
El primero quedó disuelto después de la salida de Guillermo Ferraro. En lugar de reemplazarlo, mandó todo a Economía. Como el ministro tiene otros problemas, las decisiones se acumulan en su despacho. Eso derivó, por ejemplo, en la crisis de los trenes.
El segundo, quedó a cargo de Sandra Pettovello. En “La Jungla del Poder” anticipamos en agosto del año pasado, que adentro del espacio era apodada “La profesora de reiki” y se cuestionaba su falta de experiencia y formación.
Es, sin dudas, el ministerio más ineficiente de esta gestión:
Y a todo esto se le sumaron los extraños mecanismos de contratación que ya está investigando la Justicia.
"Pettovello no ejecuta. Grita y echa. Si un funcionario tiene que jactarse de algo es con haber terminado con el mismo equipo. Ella se vanagloria de echar gente", cuenta uno de los funcionarios que la padeció.
Milei tiene un problema enorme. No hay reemplazantes para este lugar en sus propias filas y no está dispuesto a entregar este megaministerio a nadie. Tampoco puede fraccionarlo porque sería el reconocimiento explícito de que su política de motosierra fracasó.
Los mercados también leen esto y el ruido se retroalimenta.
Por último, el Gobierno sigue enredado en la Ley Bases y sus problemas en el Senado. El lunes a las 18 se juntan los jefes de bloque para consensuar el traramiento.
La sesión está convocada para el miércoles 12, pero los números están complicados. Hay al menos 5 senadores que el Gobierno contaba a favor que están tecleando.
La presentación del dictamen propio de Martín Lousteau sobre el filo del viernes, puede poner en jaque la aprobación con los números tan justos. En el mejor de los casos va a volver a Diputados y se va a seguir estirando.
Esto consolida las dificultades que tiene el Gobierno para imponer su agenda política. Algo así marcó esta semana la vocera del FMI, Julie Kozack: "Y como hemos dicho muchas veces en el pasado, sigue siendo fundamental trabajar para ampliar el apoyo político a la estabilización y reforma macroeconómica".
También pidió avanzar en reformas microeconómicas (se necesita apoyo del Congreso para eso) y “garantizar que el ajuste no recaiga desproporcionadamente en los más vulnerables”.
Todo genera más y más ruido. (Recomiendo ver el video entero, de la vocera del FMI. Es más duro de lo que pueda contar).
En el Gobierno prevalece otra mirada. Culpan a la política – a la casta- por las derrotas. La caída de bonos, y subas de riesgo país y dólares financieros es culpa de la dilación en aprobar la ley bases y de la compulsión de la política en aumentar el gasto.
Se suma la embestida judicial por la causa de los alimentos, con jueces de “probada” relación con el kirchnerismo. No hay autocrítica hasta ahora.
Ponerle fecha de tratamiento a la Ley bases mejoró las cosas. Los números de los mercados del viernes mejoraron un poco.
Pero hay dos datos que entusiasmaron al Gobierno esta semana: los índices de industria y construcción de abril que publicó el Indec esta semana.
La caída interanual de la construcción fue de 37,2%, pero respecto al mes pasado creció un 1,7%; no se crecía desde abril del año pasado.
La caída interanual de la industria fue del 16,6%. Pero respecto al mes pasado creció 1,8%. No se crecía desde abril del año pasado.
En el Gobierno insisten en que hay un crecimiento en V. Tocamos el piso y desde ahora todo es crecimiento. No todos comparten que eso se vaya a dar.
Milei sigue embelesado con sus propias ideas. En las encuestas que maneja la Casa Rosada no se movió un milímetro en la opinión pública.
Una de las favoritas del presidente, de la consultora Opinaia plantea:
Claro que este estudio es previo a la triple crisis. Por ahora, el Gobierno lo celebra. El próximo estudio se va a hacer después de la difusión del índice de inflación, este jueves. Esperan que quede en torno al 5%. Sería un gol que permitiría compensar en parte las crisis internas. Milei va a recibir el dato en medio de otra gira internacional por Europa.