El Gobierno redefine su postura respecto al planteo de Villarruel de reabrir los juicios a los "terroristas" de los años 70. Las agendas paralelas del presidente y su vice
Javier Milei y Victoria Villarruel, y una postura ambigua, reabren la discusión sobre la teoría de "los dos demonios" y el rol de los militares y los grupos "terroristas" en la dictadura. Foto: Archivo Casa Rosada
El Gobierno de Javier Milei se diferenció del anuncio de la vicepresidenta Victoria Villarruel, que impulsará la reapertura de todos los juicios de víctimas del terrorismo de los años '70 con el objetivo de que todos aquellos que hayan causado asesinatos antes y durante la última dictadura militar de 1976 entre los que mencionó a exintegrantes del grupo guerrillero Montoneros, "estén todos presos por ensangrentar" a Argentina.
Milei evitó opinar personalmente sobre el tema pero lo hizo a través de su vocero presidencial, Manuel Adorni, en conferencia de prensa en Casa Rosada este miércoles.
El vocero dijo que la reapertura de esos juicios "no es parte de la agenda del gobierno ni del presidente Milei", aunque habilitó a que lo haga Villarruel: "Está bien que ella lo impulse porque sabemos que es una lucha histórica que ella lleva hace años", respondió.
Fuentes cercanas a la vicepresidenta confirmaron a A24.com que el plan de Villarruel es presentar reclamos de reapertura de causas judiciales que se encuentran tanto en la Corte Suprema de Justicia como en distintos juzgados, pero evitaron dar nombres o anticipar de qué casos concretos impulsará.
Lo va a hacer a través de la Asociación Familiares y Amigos de Víctimas del terrorismo en Argentina acompañada entre otras, por Claudia Rucci, hija del jefe de la CGT (peronista) José Ignacio Rucci, asesinado en 1973 y por Silvia Ibarzábal, vicepresidenta de la organización que lidera la Vice, e hija de un coronel asesinado por el ERP.
Según adelantaron las fuentes consultadas por A24.com, Villarruel va a ir a pedir reabrir causas que están en la corte, y en distintos juzgados. Pedir que la vara sea la misma para todos. "Si los genocidas estan presos que los montoneros también", plantearon.
Con su mensaje lanzado en un acto en el Salón Azul del Senado el martes por la tarde, Villarruel, encontró la forma de responder a las críticas que tanto del mileísmo como de la oposición, la vincularon con el escándalo por la visita de diputados de LLA a exgenocidas presos en la cárcel de Ezeiza, que reclaman su liberación. Entre ellos, Alfredo Astiz.
Cerca de Villarruel como de Milei, desligan al Gobierno de la idea de los diputados encabezados por Benedict Beltrán para impulsar un supuesto proyecto de ley para liberar a los genocidas de la última dictadura. Algunos, incluso, responsabilizan al presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem y a la secretaria General de PResidencia, KArina Milei, que después decidieron dar marcha atrás.
Aunque nadie se hace cargo del cuestionado proyecto, cerca de Villarruel, admiten coincidir con el espíritu de la polémica visita que terminó con la ruptura del bloque de diputados y la expulsión de Lourdes Arrieta, que reveló la trama secreta del proyecto que ahora -tanto de la Casa Rosada como de la cúpula de LLA en el Congreso- descartan ante la falta de consenso.
"Victoria no promovió la visita a los militares detenidos en Ezeiza, no ve desde hace 3 años al sacerdote de Zárate Javier Olivera Ravasi, -que fue expulsado por la Iglesia por organizar la visita", dicen en el entorno de la titular del Senado y aseguran que la Vice tampoco está en contacto con ningún abogado vinculado a los represores.
Aunque evitan defender abiertamente la postura de los genocidas, muchos de los que integran la agrupación de Villarruel, tienen o tuvieron antes de su llegad al gobierno, algún tipo de vinculación con algunos de los militares detenidos y promueven lo que en los 70 se llamó la teoría de los "dos demonios".
"Reabriremos todas las causas de víctimas del terrorismo para que sea la Justicia la que haga lo que debió hacer hace más de 20 años”, prometió Villarruel en un acto que encabezó en la Cámara alta por el "Día Internacional de la Conmemoración a las Víctimas del Terrorismo" y enfatizó: “Para que Argentina pueda vivir su aurora y su renacer, todos los montoneros tienen que estar presos, respondiendo por ensangrentar nuestra nación".