Tim Walz, de 60 años y gobernador del estado de Minnesota, finalmente es la persona elegida por Kamala Harris para compartir la fórmula demócrata que enfrentará a Donald Trump, que intenta regresar por otros cuatro años a la Casa Blanca.
La mujer que tomó la posta de Joe Biden decidió quién será su compañero de fórmula para enfrentar al republicano Donald Trump. El fin de semana lo usó para definirse entre las dos personas que quedaron para la elección definitiva.
Kamala Harris ya tiene a su compañero de fórmula para las elecciones presidenciales en EE.UU. (Foto: Gentileza NYPost)
Tim Walz, de 60 años y gobernador del estado de Minnesota, finalmente es la persona elegida por Kamala Harris para compartir la fórmula demócrata que enfrentará a Donald Trump, que intenta regresar por otros cuatro años a la Casa Blanca.
El fin de semana, Kamala Harris pasó ambos días en conversación con los dos candidatos que llegaron para la selección definitiva. Los medios norteamericanos dicen que el expresidente Barack Obama obró de consejero para esta definición.
Walz es gobernador de un estado del centro norte de los Estados Unidos, una zona que suele definir las elecciones por las variantes que pueden producirse en algunos de esos estados al momento de elegir entre republicanos y demócratas.
Es de tez blanca, para acompañar a una mujer con ascendencia india y afroamericana. Es el presidente de la asociación de gobernadores Demócratas. Pero no es muy conocido en todo el país y ese es su desafío a partir de ahora.
Walz tiene 60 años y una trayectoria política de 20 años. Fue representante (Diputado) en Washington y está en su segundo período como gobernador de Minesota. Para los analistas nortemeamericanos, la fórmula que presentarán los demócratas contra Donald Trump, es sólida y homogenea, con pocos puntos discordantes entre Harris y Walz, y eso es también, un desafió para ganar votos independientes o republicanos que no quieren a Trump.
Walz y Harris son del ala progresista de los demócratas. Habitualmente se busca una combinación entre moderados y progresistas, pero no será este el caso de la fórmula que encabeza Kamala Harris, al bajarse el presidente Joe Biden.
Walz tiene una coincidencia total con Harris, por ejemplo, en el tema del aborto. Ambos están a favor del derecho de la mujer a interrumpir un embarazo. De hecho, Walz aprobó esa legislación para seer aplicada en su estado de Minesota.
También hizo más accesible el acceso a las licencias de conducir, sin importar si se trata de personas que están como inmigrantes sin sus papeles legales.
En ambos temas, marcan un contraste total con lo que propone Donald Trump y aún más con J.D. Vance, su compañero de formula. Pese a su juventud (Vance tiene 40 años) tiene posiciones mucho más conservadoras que el propio Donald Trump, sobre todo en cuanto al aborto. Trump impulsa lo que decidió la Corte Suprema - con mayoría de jueces que llegaron en su gobierno - que dejó el tema en manos de los estados al derogar la ley conocida como "Wade vs. Roe". En cambio, Vance prohibiría de plano el derecho al aborto.
La nueva fórmula demócrata es homogénea en este campo, por lo que captar votos de "republicanos moderados" parace muy difícil. Pero en cambio, podrá sumar voluntades entre quienes - aun sin ser demócratas - no quieren a Trump pero tampoco confiaban en Biden por su elevada edad e ideoneidad puesta en tela de juicio.
Pese a ello, Walz tiene otros valores como para ayudar a Harris a conquistar los votos que perdió Biden. Fuemaestro de escuela pública, entrenador de fútbol y miembro de la Guardia Nacional antes de ingresar a la política. Todos aspectos que son del agrado de los republicanos y de los independientes.
Pero de nuevo, su acción como político - en el Congreso o como gobernador de Minesota - lo configuran con la misma agenda progresista de Kamala Harris. Por lo que habrá que ver si los demócratas van por la confrontación en medio de la "grieta" que viven los Estados Unidos, antes que tratar de "seducir" a quienes no quieren votar por Trump.
Walz nació y se crió en la zona sur de Minesota, con el predominio de la tarea rural y los productos agrícolas y ganaderos. Esos sectores son más moderados o de centro que las ideas de Walz, pero lo conocen ampliamente y lo apoyaron para ganar la reelección del estado. Es el típico repreentante de norteamericano que proviene de una casa de trabajadores en el campo en el corazón del país. El votante al que Donald Trump le habla cada vez que repite "Hacer Estados Unidos Grande Nuevamente" (MAGA por su sigla en inglés). Pero tiene que luchar contra dos cosas que lo separan totalmente del candidato republicano. No es conocido en todo el país y sus ideas liberales o de izquierda no cuadran con el perfil del votante de ese interior profundo norteamericano.
Walz está finalizando su segundo mandato como gobernador en Minesota. Y tanto él como el otro "finalista" para completar la fórmula demócrata - Josh Shapiro, de Pensilvania - pertenecen a los denominados "swingers states" los estados que mudan de los repúblicanos a los demócratas en las elecciones, antes que votar tradicionalmente a un partido. Por lo tanto, son fundamentales contar con su apoyo para ganar la votación del próximo 5 de noviembre.
Son los estados de :
Walz debe cumplir con lo primero que se espera de él: mantener en la elección presidencial el estado pintado de "azul" ( el color de los demócratas". La presentación de la fórmula demócrata será en otro escenario vital.
Ambos compartirán el primer acto de campaña en Pensilvania. Gobernado por Shapiro, el demócrata que perdió la "final" con Walz, pero ya adelantó su total compromiso con la fórmula encabezada por Kamala Harris.
En pensilvania, además, fue donde se presentó hace pocas semanas Donald Trump y sufrió un atentado que casi le cuesta la vida.
