Se esperaba, pero no deja de ser una noticia que conmociona a la sociedad norteamericana. La Corte Suprema declaró inconstitucional el fallo Wade vs. Rode, que permite el aborto legal en ese país desde hace 50 años.
Se esperaba, pero no deja de ser una noticia que conmociona a la sociedad norteamericana. La Corte Suprema declaró inconstitucional el fallo Wade vs. Rode, que permite el aborto legal en ese país desde hace 50 años.
La medida del máximo tribunal del país generará una enorme controversia. Serán ahora los estados los que deberán decidir cómo y en que circunstancias el aborto será legal. Aproximadamente el país quedará divido en dos. La mitad de los 50 estados puede seguir considerándolo legal mientras que en la otra mitad, será considerado un delito grave.
El fallo de la Corte deja en una situación vulnerable a unas 36 millones de mujeres que viven el los 13 estados gobernados por los republicanos que se oponen al aborto como un derecho.
La decisión adoptada en 1973, en el fallo Wade vs. Rode permitió que el aborto fuera un derecho para las mujeres en todo los Estados Unidos. Ahora, esta Corte, conformada con una abrumadora mayoría conservadora ( 6 de sus 9 miembros) acaba de convertir un derecho en un delito.
Así lo definió una de las periodistas de la cadena CNN al dar la noticia. Sucede que La medida causa una verdadera tormenta para la estructura legal del país. Por lo menos tres generaciones de norteamericanos se encuentran con que una acción considerada legal, como un derecho, ahora está negado de plano por la Corte Suprema. En varios estados gobernados por los republicanos - como texas - había prohibiciones o restricciones. Pero las mujeres seguían teniendo la protección legal de la resolución adoptada por la Corte en 1973. Podían plantear un recurso en esos estados o simplemente, viajar a otros para realizar un aborto.
Pero ahora, la corte conservadora que dejó Donald Trump, acaba de derogar ese derecho. Por lo que en principio, desapareció esta protección en el plano federal. A partir de ahora, será potestad de cada estado definir si se lo sigue considerando legal: California y Nueva York, los dos más poblados y con más votos electorales en cada elección presidencial ya ratificaron que el aborto seguirá siendo un derecho.
Pero ya hay estados que no lo aprueba y lo mismo podría suceder de ahora en más en casi la mitad del país, debido a las iniciativas impulsadas por los "pro-life" que se oponen al aborto legal y lo consideran un delito.
El fallo Wade vs. Rode
En 1973 el aborto comenzó a ser legal para la justicia federal de los Estados Unidos. Se basó en la demanda conocida como "Roe vs Wade". Tuvo su origen en una mujer que en 1969 quedó embarazada por tercera vez. Quería abortar, pero el estado de Texas lo consideraba - como ahora - ilegal, salvo si era para salvar la vida de la madre.
Los mismos argumentos que se usaron en ese momento a favor, ahora la Corte los interpreta exactamente al revés. En enero de 1973, el Tribunal Supremo emitió una decisión de 7 a 2 por la que entendía que el derecho a la intimidad le permite a la mujer embarazada decidir si quiere o no abortar.
Como publicamos en otro artículo, se basó en la decimocuarta enmienda de la Constitución que establece: "...Tampoco podrá ningún estado privar a una persona de su vida, libertad o propiedad, sin un debido proceso legal...".
Los jueces votaron de manera mayoritaria en que ninguna persona puede ser obligada a hacer algo que vaya en contra de su libertad. Como en el caso de llevar adelante un embarazo que no desea.
Pero ahora ocurre justo lo contrario. Se impuso el criterio fogoneado por el juez Samuel Alito Jr. Este miembro de la Corte Suprema apoyó los planteos presentados ante el supremo tribunal que dicen que no hay ningún elemento en la Constitución de los Estados Unidos que abra una puerta para el derecho al aborto.
Para la nueva mayoría conservadora del tribunal, esa interpretación de la enmienda 14ta. no corresponde. Por lo que en su fallo de este viernes, la Corte Suprema entiende que los principios que hicieron legal el aborto no existen legalmente en la Constitución.
Los Estados Unidos tienen estadísticas en las que se destacan que más de la mitad de los abortos (57%) se deciden por motivos económicos: la incapacidad de llevar adelante un embarazo y procurar todos los elementos que requiere la crianza de un hijo. Especialmente, ese panorama se da entre los grupos minoritarios como los afroamericanos y los latinos.
Una de las primeras voces en protestar contra la decisión de la Corte Suprema ha sido la representante demócrata por Nueva York, Alexandria Ocasio Cortez. De ascendencia puertorriqueña, declaró que ahora minorías como las mujeres latinas comienzan a estar amenazadas en los Estados Unidos.
En mayo de este año se filtró un "paper" del máximo tribunal que adelantaba esta posibilidad que la Corte acaba de confirmar. En ese momento, se armó un revuelo nacional, en la sociedad y en la dirigencia. El juez Alito Jr. confirmó la existencia de ese escrito como asunto de trabajo que revocaría la sentencia de 1973 y haría caducar al aborto legal como un derecho.
En ese momento, el presidente Joe Biden - pese a ser católico - y su vice, Kamala Harris, dieron a conocer pronunciamientos contra ese "adelanto" que se filtró a la prensa.
Ahora, la Corte Suprema acaba de suprimir el derecho al aborto en los Estados Unidos a nivel federal. Una tormenta inusitada en el campo de los derechos personalísimos y la salud pública.