Sergio Massa junto a jefes de bloque de la oposición.
El presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, convocará a firmar "un pacto de la Moncloa Argentino" en una carta pública que difundirá en los primeros días de abril dirigida a todos los presidentes de bloques del Congreso con el objetivo de avanzar en acuerdos y consensos básicos para buscar soluciones con políticas concretas para salir de la crisis.
Massa ya adelantó ese mensaje en su participación del martes del encuentro de la Fundación Conciencia. Al hablar ante distintos referentes empresarios, sindicalistas, referentes de ONG's y gobernadores oficialistas y opositores, pidió una Moncloa argentina y señaló que prepara una carta dirigida a todos los líderes parlamentarios.
Según supo A24.com, la convocatoria planteará a los presidentes de bloques parlamentarios que hagan propuestas, y abarcará ejes clave como transformación de planes sociales por planes empleo, cadena de valor del litio, aumento de las exportaciones, medioambiente y lucha contra el narcotráfico.
En la carta, Massa convocará a crear un ámbito en el Congreso que se eleve por sobre las discusiones cotidianas.
“Sin políticas de estado, sin acuerdos amplios, la Argentina no tiene futuro. Si seguimos en la idea de la Argentina dividida, fracturada y peleada, vamos a avanzar y retroceder sistemáticamente", dijo Sergio Massa en un discurso ante líderes de distintos partidos políticos del oficialismo y de la oposición, dirigentes empresarios, ONG's y sindicalistas reunidos el martes a la noche en el encuentro de Conciencia.
El discurso anticipó la impronta que buscará darle el titular de la Cámara Baja a la convocatoria que lanzará públicamente a través de una carta en los próximos días, en la que llamará a un acuerdo nacional de todas las fuerzas políticas y sociales que comparó con el denominado Pacto de la Moncloa que se llevó a cabo en España, entre gobierno y el parlamento de ese país, para acordar un plan económico y político conjunto, para salir de la crisis post franquismo.
Massa indicó que "estos 40 años de democracia nos tienen que obligar a que hoy aprovechemos que hay actores y sectores políticos de la más amplia gama representados acá, nos comprometamos a que este año nos podamos sentar a la mesa y definir 5 o 10 políticas de Estado para todos los argentinos.
"Esa tiene que ser la invitación de Conciencia y también es mi invitación como presidente de la Cámara: poner la mesa y asumir ese compromiso con todos”, enfatizó.
El Pacto de la Moncloa consistió en la firma de dos documentos históricos en el que los representantes de los principales partidos políticos, sindicatos y otros actores sociales se comprometieron, en octubre de 1977, a seguir un programa político y económico con medidas tendientes a estabilizar la administración de un país acechado por la pobreza y el fantasma latente del regreso de la dictadura militar.
En Argentina, diversos Gobiernos utilizaron la experiencia de los Pactos de la Moncloa firmados en España en 1977, para intentar sacar al país de la crisis, pero nunca se llegó a concretar, ni siquiera en medio de la crisis de 2001.
Formalmente fueron dos pactos denominados Acuerdo sobre el programa de saneamiento y reforma de la economía y Acuerdo sobre el programa de actuación jurídica y política, fueron los acuerdos firmados en el Palacio de la Moncloa durante la transición española el 25 de octubre de 1977.
En los mismos la mayoría de la clase política española se comprometió a desarrollar en el Congreso de los Diputados y el Senado políticas concretas consensuadas entre el Gobierno de España presidido por Adolfo Suárez, los principales partidos políticos con representación parlamentaria con el apoyo de las asociaciones empresariales y el sindicato Comisiones Obreras y de la Confederación Nacional del Trabajo (CNT).
El objetivo fue la estabilización del proceso de transición al sistema democrático, así como adoptar una política económica que contuviera la gran inflación que alcanzaba el 26,39 %.
El llamado de Massa tiene como antecedente el acuerdo con la oposición que terminó semana pasada en la sanción del acuerdo para reestructurar la deuda con el FMI pero también la fuerte fragmentación política que se da en los bloques legislativos tanto del oficialismo como de la oposición en distintos proyectos de ley y temas que se encuentran trabados en el Congreso por las diferencias políticas internas.
