Néstor Ortigoza denunció penalmente al presidente Marcelo Moretti tras la cámara oculta que lo muestra recibiendo dólares a cambio de fichar a un juvenil. Detalles de una interna que estalló y expone manejos oscuros en la dirigencia azulgrana.
La interna dirigencial en San Lorenzo explotó este viernes con una denuncia penal presentada por Néstor Ortigoza contra el presidente licenciado Marcelo Moretti, tras la difusión de una cámara oculta en Canal 9. En las imágenes, el mandatario es captado recibiendo un fajo de dólares por parte de María José Scottini, a cambio de que un juvenil sea fichado en las inferiores del club.
Ortigoza, actual vocal del Ciclón y referente histórico, no sólo repudió públicamente lo sucedido, sino que detalló una serie de situaciones que, según su visión, forman parte de una estructura corrupta liderada por Moretti dentro del club. En su denuncia, aseguró que el presidente utilizaba su cargo para percibir dinero "en nombre del club, pero con fines personales", y señaló que ese dinero nunca fue registrado en la contabilidad institucional.
“Lo que Moretti llamó ‘donación’ expone un entorpecimiento de la investigación y manipulación de la prueba que, en condiciones normales, podría llevar a su detención”, remarcó el exmediocampista. Además, advirtió que el dirigente sigue dentro del club, con acceso a documentos y testigos clave.
La denuncia también apunta a prácticas recurrentes. Ortigoza rememoró el caso del uruguayo Donato Larrosa, a quien Moretti pretendía imponer en el primer equipo pese a que, según él, “no tenía condiciones ni experiencia”. A partir de su negativa, Ortigoza denunció que comenzó una campaña para deteriorar su imagen dentro del club y desplazarlo de la toma de decisiones.
La relación entre Ortigoza y Moretti comenzó como una alianza política, que los llevó juntos al triunfo en las elecciones de diciembre de 2023. Pero pronto emergieron diferencias marcadas. Hubo discusiones por fichajes polémicos como los de Orlando Gill y Maximiliano Zelaya, y roces con entrenadores cercanos a la presidencia.
El punto de quiebre se dio en agosto, cuando el Ciclón quedó eliminado en Copa Argentina ante Vélez y Ortigoza descubrió que su nombre no figuraba en la lista de ingreso vehicular al estadio de Independiente. En ese contexto, brindó una entrevista en la que expresó: “Fui convocado para encargarme del fútbol. Hoy, traen refuerzos sin consultarme y me saltean en todas las decisiones”.
La situación se agravó en septiembre, cuando se difundieron videos en los que se lo ve maltratando a su expareja Lucía Cassiau, quien lo denunció por violencia de género. Aunque San Lorenzo pidió su renuncia, no pudo ser removido, ya que había asumido su cargo por elección.
En noviembre, Moretti reestructuró el área de fútbol, desplazando a Ortigoza y dándole poder a Néstor Navarro, quien este jueves asumió interinamente como presidente tras la licencia del mandatario.
La denuncia presentada por Ortigoza no solo profundiza la crisis institucional en San Lorenzo, sino que pone en evidencia la fragilidad de una dirigencia marcada por internas, sospechas y promesas incumplidas, a menos de cinco meses de haber asumido.
