Como buena aficionada a la astrología, Agustina Kämpfer conoce las virtudes de cada signo del zodíaco y, por ese motivo, decidió que el pequeño Juan naciera de Libra y no de Escorpio, adelantando la fecha de parto.
"Yo quería parto natural sí o sí y ya estaba en la semana 40. El obstetra me dijo que ya estaba todo listo y le pregunté '¿No lo podemos inducir mañana? Por un día cambia de signo y no quiero que sea de escorpio", reveló en una entrevista con la revista Pronto.
"Los escorpianos son bravísimos. Si ya está listo, saquémoslo antes", contó que le dijo a su médico.
"Me mandó a hacerme la ecografía y gracias a eso descubrieron que por el tiempo que llevaba en la panza, se estaba empezando a quedar sin líquido amniótico. 'Ya no es solo tu deseo astrológico, tenemos que sacarlo y es una prescripción médica'", aclaró Kämpfer, ahorrándose las críticas por su decisión.
Luego, habló de su relación a distancia con Agustín Badaracco, el papá de Juan que es chef en México: "Estuvo en el parto, se quedó 20 días en Buenos Aires y volvió porque tenía que trabajar. Ahora está por venir, y durante estos seis meses lo vio por videollamada", contó Agustina. Y agregó: "Tomamos la decisión con mucha madurez y responsabilidad, pero no puedo hacerme cargo del dolor del otro, no sé qué le pasa al tener a su hijo lejos".
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