"Cuando lo tocaron a él (por Mazzei) sentí que me tocaban a mí. Fabi nos dio calidad de vida, nos permitió sentir que convivís con la verdad. Yo siempre hablé de mi trabajo, nunca de mi vida privada y cuando sucedió eso preferí callar, porque hay momentos en que el silencio es muy sabio. Pero debí reubicar esa situación en mi vida, era una línea muy delgada, porque no quería exponer a la persona que amo. Yo soy muy frontal en mis relaciones directas, pero en la tele iba a quedar mal", disparó.