Después de tres galas en las que los jugadores de Gran Hermano (Telefe) estuvieron probando llaves para encender el auto 0KM, la participante Zoe Bogach ganó este miércoles el vehículo y un año de nafta.
Una jugadora de Gran Hermano se convirtió en la líder de la semana y también se ganó el auto 0KM. ¡Mirá el video!
Después de tres galas en las que los jugadores de Gran Hermano (Telefe) estuvieron probando llaves para encender el auto 0KM, la participante Zoe Bogach ganó este miércoles el vehículo y un año de nafta.
La ahora líder de la semana obtuvo el premio al elegir la llave número 64. ¿Pero cómo comenzó esta competencia? En la noche del lunes, todos los 'hermanitos' tuvieron que nominar a dos compañeros para que no participen del desafío, y los seleccionados fueron: Mauro D'Alessio y Martín Ku.
Inmediatamente, los jugadores restantes (Zoe, Bautista Mascia, Juliana Scaglione, Virginia Demo, Florencia Regidor, Emmanuel Vich, Nicolás Grosman y Darío Martínez Corti) tuvieron que elegir entre 200 llaves para encender el tan anhelado premio.
Con cinco rondas rápidas y 40 llaves por probar, Zoe dio con la correcta y se convirtió este miércoles, durante la gala de nominación, en la dueña del auto blanco.
Esta semana fue muy polémica para el reality de Gran Hermano (Telefe) y Santiago del Moro se llevó muchas críticas del fanáticos por algunas actitudes frente a los conflictos ocurridos entre los participantes Furia y Mauro Dalessio.
Tras las críticas al programa por las fuertes actitudes de Juliana, en los últimos días el conductor remarcó que los comportamientos dentro del reality no era para utilizarse como ejemplo de nada y que no había que tomar las cosas de forma literal.
Sin embargo, este miércoles se viralizo un clip de Santiago semanas atrás diciendo todo lo contrario. “Chicos les quiero pedir algo para esta nueva instancia que tiene que ver con el trato, con los modos, y con el nivel de violencia", comienza diciendo en el tape.
Y continua: "Obviamente que en la casa tienen total libertad para hablar de todo, tratando de respetarse y respetar, pero cuiden mucho sus palabras. Están una casa que está siendo observada por el mundo entero”.
“No tienen la obligación de educar pero si bajan una línea todo el tiempo muy fuerte. Me parece que podemos dar un ejemplo, más allá de que uno discuta, siempre manteniendo una cuota de respeto, empatía y humanidad hacia la otra persona. Traten de cuidar los términos”, finaliza.