Cuando Mirtha le preguntó si había influido el hecho de que Muscari no hablara primero en su programa sobre el escándalo de Fede Bal, el conductor respondió: "Sí, porque yo no quería que ese día hiciera el descargo en Bendita. Porque además había estado en todos los programas, había estado casi en cadena nacional, ¿para qué necesitaba venir? Así que yo no tenía ganas de que un integrante de Bendita estuviera explicando a las 9 de la noche que no es nazi. Que yo creo que no lo es. Y que él ha padecido más bien la discriminación".
"Para mí, aún en un entorno privado, es un calificativo fulero", finalizó.