Por Luciano López L. / [email protected] / @lucianolopez25
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"Es decir lo que siento. Yo puedo comer con cinco cubiertos o comerme un choripán en la esquina de la cancha de Boca, no tengo problema. El hincha se exterioriza de otra manera. Yo llego a mi casa, aún si Boca pierde, me siento y ceno con mi familia, mis hijos y amigos que es lo que más quiero. Anoche eran las cuatro de la mañana y todavía daba vueltas. Ver la cara de mis hijos, que el mayor tiene 17, y que me preguntaba: ¿Papá, por qué nunca ganamos nada? Es una generación la de veinte años que lo vio así", se sinceró el periodista sobre sus sentimientos.