“Wow, qué gran momento están por vivir. Felicidades Úrsula y Chino Darín”, les escribió Calu acompañando sus buenos deseos con dos emojis de corazones rojos, demostrando así que todo quedó más que bien entre ella y el actor tras su romance allá por 2013.
Como era de suponer, su comentario no pasó desapercibido y curiosamente varios usuarios cuestionaron su saludo tildándola de "figurita", o señalándole que debería haberles hablado "en presente".
IG Calu Rivero sobre el embarazo de Úrsula Corberó
Cómo fue la historia de amor del Chino Darín y Calu Rivero
La historia de amor entre el Chino Darín y Calu Rivero se remonta a 2010, cuando sus caminos se cruzaron durante las grabaciones de la tira televisiva Alguien que me quiera. En ese entonces, lo que surgió entre ellos fue una amistad sincera. Ambos estaban en pareja con otras personas, por lo que la relación quedó únicamente en el plano de la camaradería y la complicidad laboral.
Con el paso del tiempo, esa amistad se mantuvo. Sin embargo, recién tres años más tarde, en marzo de 2013, la relación dio un giro inesperado. Fue entonces cuando decidieron darle lugar al amor y confirmar públicamente que estaban juntos. Desde ese momento comenzaron a mostrarse como pareja en distintos eventos y salidas, irradiando felicidad y complicidad. La conexión entre ellos se reflejaba en cada aparición, dejando en claro que estaban atravesando una etapa de plenitud.
El noviazgo se caracterizó por su intensidad. Durante los meses que estuvieron juntos, Calu y el Chino compartieron gran parte de su tiempo, disfrutando de la compañía mutua y de proyectos en común. La pareja se mostraba unida tanto en el ámbito público como en su vida privada, consolidando una relación que rápidamente se convirtió en una de las más comentadas del ambiente artístico en ese momento.
calu rivero y chino darin
Sin embargo, pese a la buena sintonía inicial, el romance tuvo una duración limitada. Después de aproximadamente ocho meses juntos, en noviembre de 2013 sorprendieron con la noticia de la separación. La ruptura, lejos de estar marcada por conflictos o escándalos, se dio en términos cordiales. Ambos optaron por mantener la discreción y se encargaron de aclarar que los motivos obedecían a un desgaste natural de la relación.
En ese sentido, tanto Calu como el Chino desmintieron versiones que hablaban de la intervención de terceros o de reencuentros con antiguas parejas. Según explicaron en su momento, la relación simplemente había cumplido un ciclo. Esa sinceridad y la ausencia de conflictos públicos permitieron que, aun después de la ruptura, prevaleciera el afecto y el respeto mutuo.
A partir de entonces, cada uno continuó con su vida amorosa de manera independiente. Ambos siguieron adelante con sus proyectos personales y profesionales, pero conservaron un buen recuerdo de lo vivido. Aunque su noviazgo no prosperó en el tiempo, dejó huella como una de esas historias breves, intensas y recordadas dentro del mundo del espectáculo.