En miércoles en Los 8 escalones del millón, El Trece, se vivió un emotivo momento cuando Matías, un vendedor ambulante de sahumerios en los colectivos, se quedó con el premio de un millón de pesos en el ciclo que conduce Guido Kaczka.
En miércoles en Los 8 escalones del millón, El Trece, se vivió un emotivo momento cuando Matías, un vendedor ambulante de sahumerios en los colectivos, se quedó con el premio de un millón de pesos en el ciclo que conduce Guido Kaczka.
Hace unos días Silvia, la ganadora de Los 8 escalones del millón, sorprendió a todos con su decisión tras ganar la importante suma de dinero.
Previo a quedarse con el suculento premio en la definición con otra participante, el hombre conmovió a todos con su historia de vida: vende sahumerios en los colectivos y quería alquilar una vivienda y ayudar a su hija en los estudios.
“Yo hace tiempo que vendo sahumerios en los colectivos, exclusivamente en la Línea 184”, arrancó contando el participante.
“Tengo un speech que levantar la voz para bancar el tráfico, lograr que levanten la cabeza del celular”, explicó sobre su técnica a la hora de subirse al colectivo.
El hombre contó que el premio, con el que luego se iba a terminar quedando, iba a servir para alquilar un hogar y que su hija pueda estudiar.
“Subsisto. Volví ahora después de los dos años de pandemia y la verdad que mejor de lo que pensaba”, se sinceró Matías cuando le preguntaron si podía vivir con eso.
Y remarcó antes de resultar ganador del premio: “El millón sería para alquilar algo y dejar de vivir en un hotel, y para ayudar a su hija en los estudios”.
La ganadora de Los 8 escalones del millón (El Trece) sorprendió esta tarde a Guido Kaczka al contar que pensaba destinar el dinero en hacer la fiesta de 15 de la esclerosis múltiple que padece.
“Romina Flores, que es médica genetista, que trabaja en el Hospital Churruca, soltera, sus papás son Fernando y Graciela, tiene su hermana Anahí”, comenzó con su presentación el conductor.
“Y nos contaba que tiene esclerosis múltiple, se lo diagnosticaron hace 15 años, y dice que haría la fiesta como la de 15, pero del diagnóstico, no de ella”, añadió Guido.
“Ya pasó hace lejos la mía”, señaló la participante entre risas. “Igual déjame decirte Romina, te admiro. Permiso Guido, admiro mucho a las personas que tienen una enfermedad y tienen tan buena actitud de avanzar, de verse alegre, como si no existiera la enfermedad”, intervino Ingrid Grudke, una de las integrantes del jurado.
“A mí me tocó de cerca con mi hermano, que tenía una enfermedad autoinmune, así que la verdad que los admiro por esa fuerza y energía que tienen a pesar de lo que pasan, o pasaron”, remarcó la modelo.