En su mejor momento personal y profesional, asentada completamente al frente de Intrusos, el histórico programa de América TV, Flor de la V pasó por el programa de Florencia Peña, LPA, y reveló por qué quiere volver a ser mamá a sus 47 años.
En su mejor momento personal y profesional, asentada completamente al frente de Intrusos, el histórico programa de América TV, Flor de la V pasó por el programa de Florencia Peña, LPA, y reveló por qué quiere volver a ser mamá a sus 47 años.
Todo comenzó con las preguntas rapiditas, que ya se convirtieron en un clásico del ciclo nocturno de la actriz, cuando Peña quiso saber si de la V cuidaría a Mirko, el hijo de Marley. Con una respuesta afirmativa explicando que ama a los bebés, allí surgió el tema.
Y tras repasar con humor lo que cuesta económicamente tener una criatura así como el tiempo que demandan los hijos, Flor de la V sorprendió a todos al disparar que quiere otro. “Yo tuve mellizos, y siempre tuve que dividir el cariño y no pude disfrutar el bebé al 100%. Últimamente me vino como la necesidad de la maternidad. Será que me estoy anticipando a que mis hijos ya no me dan bola porque tienen 10 años para 11”, explicó la conductora de Intrusos.
En ese momento, Peña le desaconsejó la idea -al igual que lo hace con su amigo Marley, quien también quiere darle un hermanito a Mirko- y le recomendó “Andá a terapia y trabajá el nido vacío desde ahora”. Asimismo, sobre si lo había hablado con su marido -Pablo Goycochea-, Flor de la V se sinceró: “Pablo me dijo ‘ahora no es el momento pero no lo descarto’". Y cerró con humor "Pero, ¿cuánto voy a esperar? Voy a ser como Cormillot”.
En su columna en Página 12, Flor de la V publicó un artículo, donde reflexiona sobre la falta de diversidad en las escuelas luego haber participado de una reunión de padres. “Desde que tengo uso de razón una palabra da vueltas en mi cabeza: normal ¿Qué es lo normal? ¿Qué se supone que vuelve 'normal' a un varón? ¿Y a una mujer? ¿Qué razón existió para determinar que el celeste fuera la elección 'natural' para varones y el rosa, para mujeres?”, comienza diciendo la conductora en dicho artículo.
Flor resaltó que, en muchas ocasiones, lo socialmente aceptado como "normal" representaba una barrera en su vida. "Para quienes crecimos en la década de los 80, y en una sociedad binaria, la palabra 'normal' establecía un límite: estabas dentro o fuera. Te podía hacer sentir que pertenecías a este mundo o que eras un ser extraterrestre. Muchas veces, en la escuela, me encontraba mirando a mi alrededor sin poder identificarme con nadie”, siguió.
En ese sentido, la figura de América TV recordó que en el colegio no identificaba con ninguno de sus pares. “Ninguna de las personas o niñxs que me rodeaban se parecían a mí o actuaban como yo. No era normal. No formaba parte de ese ecosistema. ¿Estaba fallada? ¿Por qué no veía a otrxs como yo? Crecer sintiéndome tan distinta fue muy difícil y más en esa época en la que esa diferencia era razón suficiente para que a alguien lo excluyeran de actividades, amistades, espacios, etc”, explicó.
“Lo que no termino de asimilar es una sensación que no tiene una respuesta para mí: ¿Soy la única mamá trans porque efectivamente somos pocas quienes desde chicas experimentamos la necesidad de reconocernos y que nos reconozcan?”, plantea la conductora en la publicación de Página 12.
En el final, Flor manifestó que espera algún día ver un cambio significativo en la sociedad. "¿Seguimos siendo pocas porque en este modelo en que vivimos todavía la represión es tan grande que no todas logramos romper con la norma? ¿Seríamos más si la sociedad dejara de estar tan pendiente del binarismo? ¡Quizá en un futuro no binario no sería ni siquiera necesaria la expresión trans”, concluye el artículo.