Fue el 20 de julio pasado cuando el periodista Mariano Rinaldi sorprendió a todos informando desde su cuenta de X la sorpresiva muerte de su pareja, Andrea, con quien tiene a su hija Nina, de siete años.
El periodista y conductor del canal de la Ciudad, Mariano Rinaldi, relató de manera conmovedora en su página web cómo su mujer, y madre de su hija de siete años, se descompuso y murió en apenas cuatro días.
Fue el 20 de julio pasado cuando el periodista Mariano Rinaldi sorprendió a todos informando desde su cuenta de X la sorpresiva muerte de su pareja, Andrea, con quien tiene a su hija Nina, de siete años.
“Les pido una oración por el alma de mi amada Andrea que desde hoy nos cuida desde el cielo”, pidió el periodista sin mayores explicaciones en medio del profundo dolor que atravesaba. En tanto, al día siguiente compartió una extensa carta expresando su dolor y detalló paso a paso qué pasó con su esposa.
“Hace una semana a esta hora Andrea y yo íbamos juntos a un médico clínico para que nos recetara los chequeos habituales: corazón, laboratorio, etc. Ella tenía una leve gripe que no llamó la atención del doctor”, comenzó relatando el periodista en página web para luego detallar cómo siguió todo.
“Al día siguiente estábamos recibiendo a tres médicos en casa para terminar la noche en el shock room de Los Arcos porque Andrea tenía un dolor muy grande en todo el cuerpo y se tiraban diagnósticos sin poder dar en el clavo. A la mañana siguiente me dijo 'Me llevan a terapia' y fue la última vez que me habló porque fue a parar a la unidad coronaria con coma inducido”, continuó.
En tanto, en otro tramo del desgarrador relato, Rinaldi explicó el derrotero que terminó con la vida de la madre de su pequeña hija. “La madrugada del jueves me despertaron para decirme que la trasladaban. ‘¿De Los Arcos? ¿A dónde?’ pensé casi dormido. ‘Necesita un lugar de mayor complejidad en temas cardíacos’, fue la respuesta. Así fue derivada al ICBA con una bomba que le ayudaba a su corazoncito que apenas podía funcionar", detalló.
Al tiempo que siguió: "Ese jueves la operaron y supe que su condición era crítica, por eso cuando el viernes estuvo estable, tanto en el parte de la mañana como en el de la noche, lo vivimos como una mejora. Pero esa sensación duró poco porque en la madrugada me llamaron para decirme que ese sábado a las 6 debía estar allí para firmar el consentimiento porque volvían a operarla. Salió de la operación a las 11 y al mediodía su inmenso corazón no pudo más”.
Tras este minucioso relato, Mariano Rinaldi explicó todavía atónito y sin creer cómo la vida de su esposa se esfumó. “En cuatro días y medio una infección viral se llevó a una mujer sana, sin problemas, vicios, ni antecedentes cardíacos y sin darle la mínima chance", sentenció.
"En cuatro días y medio mi hija Nina, de siete años, y yo perdimos a nuestro sol, al ser más maravilloso que pasó por nuestras vidas. Dejó un agujero tan inmenso como inesperado. Pero dejó también una verdadera legión de amigas que la amaron y de gente que la apreció mucho", sumó en medio de un profundo dolor.
Asimismo, agradeció las inmensas muestras de afecto recibidas por la memoria de Andrea. "En estas horas no he parado de recibir mensajes y saludos de gente que apenas conozco diciéndome: ‘A mí me hizo tal o cual cosa, a mí me dijo, a mí me ayudó con esto o aquello’. Andrea era un corazón gigante y cálido como un sol”, confió.
En tanto, en las últimas líneas de su trágico relato, Rinaldi honró la memoria de su compañera de vida durante los últimos 15 años: “Andrea cambió mi vida. Estos 15 años fueron de felicidad plena. Nadie que me haya conocido aunque sea por arriba ha dejado de oír su nombre. Ahora se fue. Dios la llamó y entender por qué o para qué tan pronto me excede. Me dejó de herencia la vida en pareja que jamás soñé tener y lo más importante: una hija hermosa por la que hizo mil sacrificios para poder quedar embarazada. Ahora tendremos que aprender a seguir como podamos: siendo padre – madre, acomodando los horarios del trabajo y mis cosas a esta nueva realidad que nos inundó. Y lo más difícil de todo: ahora tendremos que aprender a seguir viviendo sin su amor”.
“Sin embargo pese a todo el dolor y la desolación que siento en este momento por su partida volvería a elegirla sin la más mínima de las dudas, sin cambiar el menor de los detalles para vivir millones de veces más cada momento de los 15 años del amor que compartimos”, concluyó declarándole a la memoria de Andrea todo su amor.