Silvestre lanzó en el programa de Mirtha Legrand una acusación tremenda contra Daniel Scioli. Pero la falta de pruebas contundentes ante semejante denuncia, dejaron en evidencia su sed de venganza o una operación política.
Silvestre lanzó en el programa de Mirtha Legrand una acusación tremenda contra Daniel Scioli. Pero la falta de pruebas contundentes ante semejante denuncia, dejaron en evidencia su sed de venganza o una operación política.
Con el correr de las horas, el objetivo de desprestigio se volvió un boomerang para el cantante. Silvestre pasó de ser víctima a victimario. No solo por las aberrantes acusaciones de un supuesto abuso de Scioli sobre su exesposa Verónica Vieyra, sino porque su exposición mediática trajo a escena problemas familiares del pasado y hasta una denuncia por violencia de género de su exesposa, Deborah Ramos.
"Me acuerdo cuando fue a hacer la denuncia. La había trompeado en la calle en la zona de Boedo. Me acuerdo de la carta a Andrea del Boca. Me acuerdo de todo", señaló el conductor de Intrusos.
Rial señaló que "Silvestre no midió las consecuencias. Una cosa es la infidelidad y otra muy grave es el abuso de menores".
Por su parte, Ventura explicó su furia del día miércoles cuando en un cruce telefónico con Silvestre se levantó y abandonó el piso de Desayuno. "Les prometí a mis hijos no enojarme más en televisión y sentí que el diálogo con Silvestre no tenía regreso".