A casi tres años de haber dejado el hockey, la mejor jugadora de la historia confiesa el sufrimiento que padeció cuando dejó de jugar y cómo el amor del ex tenista chileno Fernando González la sacó de la tristeza.
Instalada en Santiago de Chile desde hace un año, hoy afirma que su prioridad absoluta es formar una familia.
"Ahora disfruto de la vida. Con Fer estamos en esa etapa. Aprovechando mucho los viajes, conociendo ciudades, pero desde otro lugar", afirma Luciana Aymar en Revista Gente.
A su pareja la conoció en Pinamar pero se reencontraron hace un año en Miami. Desde entonces no volvieron a separarse.
"Cuando dejé de jugar, lo primero que hice fue encontrarme conmigo misma. Hallé cosas muy buenas... y otras no tanto. Te juro que pensé: ¡Qué piba más loca!", cuenta en la extensa entrevista realizada por el semanario.
Sobre la maternidad Lucha remarca: "A los dos nos encantaría ser padres. Fue, a los 37, tampoco tiene hijos. Como ahora estoy dando espacio a mi vida privada, íntima, es algo que se puede dar".
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